Consejos para decorar nuestro escritorio
El escritorio es uno de los lugares en los que más cómodos tenemos que sentirnos. Ya sea estudiando o trabajando, nuestro escritorio debe transmitirnos confortabilidad para que las tareas que realizamos en el nos resulten más fáciles y nuestro entorno sea más adecuado a ello.
El que un escritorio sea más o menos atrayente para nosotros depende en gran parte del que compremos. Por supuesto, su forma debe resultarnos cómoda y atractiva pero también debe ser funcional. Trabajar en un escritorio en el que encontramos carencias nos acabará estresando y desilusionando.
Si tenemos un escritorio básico, como los de madera y no nos gusta su color, podemos hacerlo más divertido. Necesitaremos cintas de colores adhesivas y paciencia. Cuanto mayor sea el diámetro de cada royo de cinta, menos trabajo nos llevará. Sólo debemos colocar en el sentido que queramos las cintas una a una sobre el tablero e ir pegándolas con cuidado, para que no queden arrugas ni bolsas de aire.
Otro método bastante sencillo será comprar pegatinas con motivos que nos gusten (flores, animales) o algún vinilo estampado (leopardo, vintage, naturaleza) e incorporarlo a nuestro escritorio.
Colocar flores o algún objeto personal hará que no sintamos como si el escritorio fuera un lugar aburrido en el que tener que emplear tiempo que no queremos. Las flores violetas son bastante relajantes al igual que las rosadas, sobre todo las pálidas. Las flores amarillas inspiran y ayudan a concentrarse. Un portafotos o algún complemento de escritorio como vasos portalápices también lo harán más familiar.
Todo lo que queramos añadir al escritorio y que nos ayude a sentirnos más cómodos será bienvenido. Eso sí, no debemos sobrecargarlo porque entonces no tendremos espacio para trabajar.
