El dormitorio es un área no demasiado transitada, donde no suele haber problemas de humedad ni de excesiva suciedad, por lo que no hay un material intrínsecamente más acertado para este espacio. Las opciones se abren casi ilimitadamente, ofreciendo su caudal decorativo para crear espacios privados y personales, los dos atributos centrales de la habitación.
– Baldosas de cerámica o piedra: Los dormitorios embaldosados son eternamente clásicos y sofisticados (y cuando decimos “eternamente” también nos referimos a su longeva durabilidad). Un revestimiento de cerámica o piedra natural es la base válida para muy diversos estilos decorativos, desde los más señoriales hasta las vanguardistas tendencias minimalistas, ya que son miles los diseños y colores disponibles. Si apuntas a la sofisticación, entonces las baldosas serán una opción atinada para revestir el dormitorio.
-Madera: Los suelos de madera aportan calidez y naturalidad como ningún otro material. Sobre la versátil base de madera (que puede adquirir muy diversas tonalidades) se puede desplegar casi cualquier composición decorativa. La madera es, entonces, la opción segura si tienes propensión a cambiar los muebles y textiles con frecuencia.
– Suelos laminados: Compuesto de fibras sintéticas mezcladas con partículas de madera natural, el suelo laminado cuenta con una capa protectora transparente que lo hace resistente a los estragos de la humedad y lo vuelve fácilmente lavable. La lámina visible de este revestimiento presenta diseños de enorme variedad, que imitan a la perfección las tonalidades de la piedra, la cerámica y la madera, pero sin alcanzar los costos altos de estos materiales. Por su sistema flotante sobre el contrapiso, el suelo laminado es un excelente aislante, manteniendo a la habitación más protegida del ruido y de las temperaturas extremas.
– Vinilo: Los revestimientos de vinilo son cada vez más populares dada su fácil instalación, su alta resistencia y su accesibilidad económica. Hay millares de diseños que pueden adaptarse exactamente al estilo de la decoración. No es el material más sofisticado pero resulta una solución práctica y atractiva cuando se desea reformar la habitación sin gastar demasiado dinero.
– Alfombrado: La moquette o revestimiento alfombrado es una de las opciones clásicas para dormitorio. La calidez de este material es ideal para andar descalzos sin temor al frío de otros materiales, mientras que su suavidad es perfecta para un área de juegos en el dormitorio infantil. Económica y fácil de instalar y cambiar, la moquette tiene como contraparte la dificultad de su limpieza y mantenimiento: hay que pasar la aspiradora diariamente para que el polvo no se acumule.
